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Las Luces del Real Jardín Botánico

Nai • dic 02, 2019

Christmas Garden en Madrid

Ayer fuimos a disfrutar de "Las Luces del Real JardínBotánico". Teníamos las entradas compradas desde hace casi un mes, y nos tocó un día de lluvia torrencial. Tanto es así, que íbamos con mis padres, mi hermano, mi cuñada y mi sobrino, y entre la aglomeración de gente de la entrada y el agua que estaba cayendo, solo nos atrevimos a quedarnos nosotros. Torpedín lo único que quería hacer era saltar en los charcos como Peppa Pig, Bolinha iba dormida en la mochila, protegida del frío y el agua metida dentro de mi abrigo, así que aprovechamos la tesitura para darnos un paseíto bajo la lluvia.

Es un paseo muy bonito para dar una noche navideña. Esas luces de colores en la oscuridad con la formas de instalaciones de figurines goyescos y las portadas, hacen que te de la sensación de estar entrando a un lugar mágico. Me gustó especialmente una bóveda de luces de colores que se encendían formando diversos patrones al mismo ritmo de una música que sonaba y te transportaba a otro lugar.

Grandes bolas luminosas, árboles navideños, corazones, arbustos iluminados como si fueran nubes venidas de otra galaxia. En la oscuridad de la noche madrileña, la sensación es muy bonita. Me quedé con ganas de perderme sin prisa en esas luces, de sentarme a disfrutarlas.

Mi rincón favorito fue el de un unicornio que verdaderamente parecía que estaba escondido en un jardín mágico. Parecía una criatura escapada de un cuento que había ido a parar al Jardín Botánico de Madrid.
Me pareció que la organización deja que desear. Aun teniendo las entradas compradas, tuvimos que hacer más de media hora de cola que subía por toda la calle, mientras llovía de lo lindo. Al llegar vimos la cola y dijimos: "¡Menos mal que tenemos entradas!" . Hasta que preguntamos, y nos dimos cuenta de que los cientos de personas que estaban en la cola también las tenían. Y diréis... ¿Por qué no cambiasteis las entradas para otro día? Pues porque no se puede. Ya te avisan que si hace frío te abrigues, y si llueve vayas preparado. Tuvimos la mala suerte de haber comprado las entradas en el día más lluvioso de lo que llevamos de año en Madrid. Un poco de lluvia tiene gracia, pero ayer caían chuzos de punta. Así que, primera reflexión: más vale que aciertes con el tiempo. En mi opinión, en un día de lluvia como el de ayer debían dejarte ir otro día a disfrutar de verdad de la experiencia.

En la web lo anuncian así: "Las Luces del Real Jardín Botánico te ofrece disfrutar junto a los tuyos de un momento de calma y distracción del ajetreo y bullicio de la ciudad en Navidad, y os invita a vivir una bonita experiencia en la época más hermosa del año". Una vez que entras es bonito, pero llevas más de media hora haciendo cola con frío y, si tienes mala suerte, con lluvia. Como todos estos macroeventos, no te imagines que vas a ir idílicamente dando la mano a tu pareja caminando entre exóticas plantas iluminadas como un cuento de hadas. Las plantas y las luces están ahí, y son bonitas, pero el aforo del botánico es de mil personas, y lo llenan. ¿Es bonito? Sí. ¿Agobiante? Hasta que consigues entrar al Jardín y moverte un poco a tu aire, también. Las zonas pequeñas, como la rotonda de los corazones, tiene cola para hacerte un a foto. Segunda reflexión: en la medida de lo posoble, evita los fines de semana para evitar aglomeraciones.
Otra cosa a tener en cuenta es el precio. Si las compras por internet son 15 euros por persona. El Botánico habitualmente cuesta 6 euros de entrada general. Estudiantes y adultos de familias numerosas, 4 euros. Mayores de 65 años, 2,50 euros. Menores de 18 años, entrada gratuita. Ahora la entrada más barata son 9,90 euros, y pagan niños a partir de 4 años. Entiendo que tiene que ser una pasta organizar esto, pero si multiplicas aforo por hora por el precio de cada entrada, y tienes en cuenta que hay 5 pases al día, con el número de días que va a estar abierto... Quizá podían haber ajustado un poco más el precio. Me parece un poco excesivo. Una familia con un par de hijos puede estar pagando 50 euros para un paseo de una hora.
Este es el rincón del unicornio que me pareció una auténtica preciosidad.

El proyecto “Christmas Garden” (Jardín de Navidad) se hizo famoso en Inglaterra bajo el título “Christmas en Kew”, tomando el nombre de los jardines de Kew en los que tuvo lugar por primera vez. “Christmas Garden” es muy popular en Alemania, cada año se realiza con gran éxito este evento en el Jardín Botánico de Berlín, Stuttgart y Dresde.

CONCLUSIÓN FINAL: Aunque es caro, es bonito y una experiencia diferente. Te doy dos consejos:
1. Intenta comprar las entradas sabiendo aproximadamente el tiempo que va a hacer según la previsión. Si vas con mal tiempo vas a disfrutar mucho menos de la experiencia y vas a estar mucho menos tiempo en el Jardín. Si llueve, vete con botas de agua y chubasqueros, y prepárate a saltar en los charcos. Es lo que hicimos nosotros (solo que sin chubasquero y sin botas de agua), y nos lo pasamos bien.

2. Apunta a las últimas horas si puedes (con niños está complicado ir más tarde de la sesión de las 20:00, lo sé) o vete un día entre semana. Seguro que hay días entre las vacaciones escolares de Navidad entre semana que está más accesible y se disfruta más de la experiencia.

De vuelta al coche, nos llevamos esta estampa que os enseño aquí del estanque de El Retiro. Ni un pato, ni una persona, ni un alma. Bueno, seguro que las carpas gigantescas estaban bajo el agua disfrutando del sonido de la lluvia sobre el estanque nadando a sus anchas. Parecía que estábamos todavía en un cuento.
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